Descripción
Después de un planteamiento inicial en el que el autor expresa su toma de posición frente al hecho televisivo (ni apocalíptico ni integrado), en un primer capítulo esta obra desarrolla su marco teórico referencial acerca de los efectos de la televisión, que luego aplica a los efectos mentales como consecuencia de la forma neuro-fisiológica de percepción y los efectos sociopsicológicos que la televisión tiene como agente de socialización. Pocos inventos humanos, si acaso alguno, con su simple y pura existencia y al margen de sus contenidos, han tenido tantas repercusiones en los más diversos ámbitos de la vida personal y social de millones de seres humanos, al constituir el medio de comunicación más impactante que haya existido jamás. Pero la televisión tiene también sus efectos directamente relacionados con sus contenidos; al hablar de ellos, el autor alude a la televisión como electrodoméstico ideológico-cultural. En otros dos capítulos, se analiza lo que Ander-Egg denomina el ágora electrónica que, en las últimas décadas, ha transformado profundamente la vida política, en particular el modo de hacer política. En el último capítulo, se analiza uno de los temas de mayor actualidad: la violencia televisiva y su posible influencia en la conducta de los seres humanos.